Pensé que la vida contigo...

Hoy pensé en todo el amor que me haces sentir, pensé en esa pasión caliente que me sube por el cuerpo como espuma cuando estoy contigo.
Hoy pensé en todo el miedo que se me acumula en el pecho al verme sola. 
Sola de ti.
Hoy pensé en tus manos en mi pecho, en tus dedos delineando el lugar exacto donde debería estar mi corazón.
Hoy pensé en la calidez de tu cuerpo abrazándome, la paz que me das, la ternura que me transmites.
Pensé que la vida contigo es un sueño, un secreto que sólo tu y yo conocemos, y que no podemos decirle a nadie más o nos creerían locos.
Pensé también en todo lo que me has dado, la devoción con la que besas mis manos, creadoras de letras absurdas, la pasión con la que abrazas mi cuerpo, como si me fuese a evaporar.
Pensé en nuestros pasos cercanos, en nuestros pies que a veces pierden el camino a casa.
En tus brazos fuertes que me sostienen cuando me siento caer.
En tus besos suaves que me vuelven ligera.
Pensé en esos momentos en que duermes entre mis piernas, tan vulnerable, tan cansado de todo.
Hasta de mí.
Pensé en las risas, las querellas, el amor.
Hoy pensé que tengo mucho que decirte, que tengo miles de cosas por contarte, pensé que no me salen las palabras, que no puedo explicar como me siento, que me ahogo con lo que no digo y que lo que digo me deja un mal sabor en la boca.
Hoy pensé en nosotros.
Pensé en que tengo las respuestas.
También pensé que no importa.