¿Vivimos en una distopía? Parte 2: El enemigo y la guerra (2)

 Aquí me tienen de vuelta, las analíticas de mi blog subieron como espuma desde el primer día que publiqué, estoy intentando ser constante y encontrar un huequito todos los días para transcribir las veintitrés páginas de cuaderno que escribí sobre este tema. 

Continuando con el tema anterior, el enemigo, real o imaginario, sirve también para demostrar el poder del partido/régimen que es respaldado con detenciones o asesinatos, muchas veces (casi siempre en algunos países) fuera de la ley y del debido proceso. 

"No pasaba ni un solo día sin que espías y saboteadores que trabajaban siguiendo sus instrucciones (de Goldstein) fueran agarrados por la Policía del Pensamiento."

Estas detenciones o asesinatos, además, deben ser públicos o televisados y presentados como un acto de heroísmo, porque no basta con demostrarle al pueblo que se tiene enemigos, hay que dejar claro que también se puede lidiar con ellos, que el régimen puede proteger a sus ciudadanos. 

Un ejemplo de esto es la propaganda cubana donde fotografiaban a Fidel y al Che fusilando "enemigos de la revolución" o el asesinato de Oscar Pérez en Venezuela, que fue un despliegue de unidades y armamento impresionante, televisado y además expuesto en redes sociales. En Corea del Norte se habla abiertamente de los campos de trabajo donde las penas son generacionales, y pasaba igual con los gulags soviéticos y los "campos de trabajo" nazis donde "reeducaban" a sus enemigos. 

En el libro Wiston dice no darse cuenta de en qué momento comenzó a gritar al igual que el resto, la adrenalina que produce este tipo de política populista es algo con lo que estamos muy familiarizados los latinos, pues en las marchas y meetings muchos ciudadanos se dejan llevar por el odio desenfrenado, un ejemplo perfecto es el siguiente: 

En 2010 hubo un ataque a la flotilla de Gaza, en el que la Marina de Israel abordó una flotilla de seis embarcaciones de la organización pro-palestina Free Gaza, ataque en el cual murieron nueve activistas y un periodista, dejando varios heridos y a una persona que quedó en coma para morir cuatro años después.

A Chávez se le ocurre hablar del tema en una cadena nacional, y con su siempre poder para la palabra y teatralidad, dijo "desde el fondo de mi alma, y de mis víscera al Estado de Israel -maldito seas- Estado de Israel" muchas de las personas presentes vitorearon y aplaudieron, pueden ver el vídeo, muchos dijeron que esto fue lo que condenó a Chávez a morir, yo la verdad no soy tan supersticiosa, lo que si desató fue una ola de odio a los judíos en Venezuela, estas personas (muchas ni siquiera entienden el conflicto entre Israel y Palestina) se llenaron la boca repitiendo las palabras de Chávez, sin saber qué pasó, sin tener información alguna al respecto, repitiendo como loros.

El Venezolano no tiene sus dos minutos de odio, hace tiempo que no estoy allá pero me parece que ya no son tan populares las cadenas nacionales de horas hablando del imperialismo yankee y el ejemplo que es Cuba para los pueblos latinos, en fin, nada de palabrería sin sentido, pero aunque las largas -larguísimas- cadenas nacionales se hayan acabado, todavía existen programas en la televisión como La Hojilla, Zurda Konducta o el peor, Con el Mazo dando, que esparcen odio y estupidez durante horas.

 "Oceanía estaba en guerra con Eurasia; por tanto, Oceanía siempre había luchado contra Eurasia. El enemigo circunstancial representaba siempre el absoluto mal, y de ahí que era totalmente improbable cualquier acuerdo pasado o futuro con él."

Winston nos cuenta esto porque él está seguro que hace apenas cuatro años Eurasia era su aliado, pero el ministerio de la verdad se había encargado de eliminar cualquier rastro de esta alianza.

Esto me recuerda, para Cuba y Venezuela, durante años, el enemigo del país ha sido Estados Unidos, todos los males del país han sido culpa del "bloqueo" impuesto en Cuba y posteriormente en algunos políticos y criminales venezolanos (porque el narcotráfico es un crimen, no sé si sabían pero ser narcotraficante es ser un criminal ¿se entiende? perdón la insistencia, quería que quedara claro) 

Ernesto Cardenal en su libro "En Cuba" del cual les dejé un vídeo en mi Instagram nos comenta varias veces la creencia popular de que todo era culpa de "los americanos", pero en 2015 cuando Venezuela entró en una de sus peores crisis, Cuba buscó refugio ¿cómo no? en los Estados Unidos, de repente, no era tan malo, también escribí un post sobre el tema titulado "amor con hambre no dura" que por alguna razón no puedo encontrar en mi blog, pero pueden seguirme en mis redes sociales (del lado derecho de su pantalla están los enlaces) y si logró encontrarlo en esta mezcla de letras que se ha convertido mi blog, entonces publico el enlace.

"Nadie escuchaba lo que el gran camarada estaba diciendo. Eran sólo unas cuantas palabras para animarlos, esas palabras que suelen decirse a las tropas en cualquier batalla, y que no es preciso entenderlas una por una, sino que infunden confianza por el simple acto de ser articuladas."

Esto de tratar a los ciudadanos como un ejército también es algo muy común, lamentablemente, a veces ni siquiera nos damos cuenta, pero la militarización está ahí, en los slogans "patria, socialismo o muerte" "rodilla en tierra" "viviremos y venceremos" ¿A quién venceremos? ¿A la dictadura? ¿A los narco gobiernos? quién sabe...

Además de esto, la creación de "grupos militantes" como las llamadas "milicias" en Venezuela, que son un montón de adultos mayores puestos a hacer el ridículo en televisión nacional, diciendo que estamos preparados para cualquier amenaza externa.

Mi profesor de derecho Constitucional con el cual ahora no tengo tantas opiniones en común como las tenía cuando era una estudiante de primer año de derecho, siempre nos hablaba del mito latinoamericano de que podíamos vencer al "imperio" y "vengarnos" por decirlo de algún modo, de la colonización, con nuestro orgullo racial, y ponía el ejemplo de un indio con arco y flecha peleando contra un avión de guerra, todos reíamos, estamos orgullosos de nuestra herencia racial, pero al menos por mi parte, no pienso vengar una colonización de hace unos cuantos siglos, me refiero a que, por suerte, Venezuela, Cuba, Nicaragua, etc, no tienen otra guerra que no sea la que se libra adentro de su propio territorio, entre las mafias, las pandillas y el ciudadano común, que me parece un cuadro mucho más aterrador que el del indio contra el avión, y del que ninguno de los gobiernos que mencioné quiere hacerse cargo.