Por él y por lo que fue.

No lo odio, me odio a mi misma por llegar a pensar que se podía cambiar, sé que no será fácil y tampoco quiero olvidar, pero aprenderé a vivir sin él, a no esperarlo más todas las tardes, a no abrazarlo a no besarlo, a no mirarlo a los ojos, a no verlo sonreír, me acostumbraré a no ver las pecas en su nariz que tanto me encantan y espero que así como alguna vez tuve el valor de entregarle muchas cosas tenga el valor de quitar su recuerdo de mi vida, aunque sé que es imposible. 
Eliminar las fotos, quemar sus cartas, quitar sus dibujos, esa taza, ese elefante, esos besos... esas caricias, esas miradas, lo que luchamos. 
Creo que la parte más difícil es el aceptar que estoy sin él, que la gente me pregunte por él y decir "Esta bien" cuando sinceramente no sé nada... 
Él era mi inspiración, todo lo que ustedes leen, eso que les encanta es gracias a él y sin él no soy más que una muñeca rota con tontos sueños de ser famosa. 
No sé si es lo mejor pero si sé que estoy triste... 
Amo desde mi ventana, amo mis letras, amo eso que tuve entre mis brazos... lo amo a él.
Y cada cosa que veo me lo recuerda, ahora y por siempre seré suya o no lo sé.