Pero no me dejaste.

Te tomé de la mano y corrí a tu lado, corrí sin saber a donde me dirigía, pero corría porque tu corrías, quería mostrarte que confiaba en ti. Pero no me dejaste.
Me senté a escucharte, a ver cada una de tus muecas, secar cada lágrima, hacer más grande cada sonrisa, quería mostrarte que estaría siempre ahí. Pero no me dejaste.
Te apoyé, te hice sentir cosas, te amé sin pedir nada a cambio, hice lo posible porque no te dieras cuenta de esas cosas que te molestaban pero que tristemente no podía eliminar, quería mostrarte que haría todo por ti. Pero no me dejaste.
Te dejé enterrar tus manos en mi cabello, fingí mil sonrisas, te dejé entrar en mis pasatiempos, en mi vida, en mi corazón... quería mostrarte que podía ser sincera. Pero no me dejaste.
Te enseñé todas mis facetas, acepté todas las tuyas, traté de alegrarte los días y las noches, quería mostrarte que eso que tanto deseabas era posible. Pero no me dejaste. 
Ahora sólo deseo, con todas mis fuerzas, que no regreses, que no pidas perdón, que no digas que me extrañas, que quieres mis besos tiernos de nuevo, ni mis sonrisas amplias, ni mi amor incondicional, porque traté de dártelo todo... pero no me dejaste.

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